Every Day the Protagonist Wants to Capture Me (English to Spanish) - Capítulo 19
Su mirada despistada parecía auténtica. Xie Xi se sorprendió y sintió cómo su ira se evaporaba. Frunciendo el ceño, preguntó: “…Shixiong, ¿de verdad no sabes a qué me refiero?”
Chu Yu seguía estupefacto.
Xie Xi le miró de cerca en silencio.
Un paso adelante, y tal vez caería al abismo a su propia destrucción, o tal vez lograría todos sus deseos y viviría sin arrepentimientos.
“Shixiong, yo…” Xie Xi abrió la boca queriendo decir las palabras que llevaban rondando en su cabeza durante los últimos dos días. Las tenía en la punta de la lengua, pero no se atrevía a hablar.
Todavía temía que Chu Yu le rechazase.
“No tengo esa clase de sentimientos hacia ti, shixiong.”
Chu Yu, aliviado, retiró a Xun Sheng y le dio una palmadita en la espalda desnuda a Xie Xi. “Lo sé, fue un error, no volverá a ocurrir… ¿ya no estás enfadado? Corre, ve a vestirte.”
Parecía que intentar activar las habilidades de seducción del protagonista no iba a funcionar… la única cosa que se podía hacer era esperar a que llegase una chica linda en el futuro que hiciese latir su corazón.
Xie Xi no parecía demasiado enojado gracias a su explicación, así que parecía que todavía le tenía bastante aprecio y que Chu Yu sería capaz de abrazarse a los muslos~
El shixiong y su shidi, hechas las paces, se miraron sonrientes, pero sus mentes y sus corazones estaban en posiciones contrapuestas sin saberlo.
Volvieron a la hoguera y Xie Xi se vistió. Chu Yu se acordó de nuevo de algo: “Por cierto, ¿qué pasó con el demonio zorro?”
De repente, a Chu Yu le entró un sudor frío al darse cuenta de que la piel sobre la que estaba sentado se parecía más y más a una piel de lobo.
Esos dos demonios desafortunados no habrían sido eliminados por Xie Xi, ¿verdad?
Xie Xi sacudió el agua de su pelo largo y se sentó al lado de Chu Yu con una sonrisa. Habló con voz dulce: “Shixiong, adivina.”
Al ver la extraña expresión en el rostro de Chu Yu, Xie Xi se rió y dijo tranquilo: “¿Acaso no se comió ese zorro los dulces de shixiong? No me pareció bien, así que la perseguí con la espada un rato. Debe tener demasiado miedo como para salir ahora.”
¿Le había seguido, había perseguido al pobre demonio zorro, cazado otro animal, y todavía le había dado tiempo a desollarlo mientras esperaba a Chu Yu?
Chu Yu casi cae de rodillas. “…”
***
La ciudad de Fang Ye estaba al oeste de las montañas de Tian Yuan, cerca de la frontera con Jiao Xia. Chu Yu y Xie Xi estuvieron viajando tranquilamente un mes hasta llegar a la ciudad. Los dos encontraron una posada y, considerando que Xie Xi no puede dormir sin agarrarse a alguien, Chu Yu eligió dos habitaciones conectadas.
Xie Xi sonrió al verlo.
Los otros discípulos de la secta de Tian Yuan también deberían haber llegado a la ciudad de Fang Ye. Chu Yu meditó durante un tiempo y determinó que el Chu Yu original no se habría molestado en buscar a sus compañeros discípulos. Por lo tanto, si iba a buscarles, se vería raro.
Xie Xi se sentó con las piernas cruzadas en frente de Chu Yu, sonriéndole. Mientras Chu Yu pensaba, entrecerró los ojos. Sus ojos de ordinario parecían dos lagos de hielo profundos y fríos, pero al cubrirlos sus largas pestañas daban una sensación amable y dulce.
“¿En qué estás pensando, shixiong?”
“Los insectos demoníacos van a eclosionar en cosa de un mes.” Chu Yu se tocó la barbilla. “Quien se conoce a sí mismo y conoce a su enemigo es invencible. Sería una buena idea ir a verlos eclosionar.”
Los insectos demoníacos tenían mucha energía y eran extremadamente tenaces y feroces. Una vez puestos los huevos y establecidos en un lugar, no es posible destruir el nido ya que no hay manera de cortarlos o separarlos.
Los insectos parecían gusanos y por naturaleza ansiaban sangre. Los nidos siempre estaban cerca de ciudades. Diez años atrás, cuando hubo una plaga de insectos demoníacos, la población abandonó la ciudad, temiendo por su vida.
Chu Yu, con el propósito de proteger su propia vida y la del protagonista, había buscado información sobre los insectos demoníacos por todas partes. Desafortunadamente, sólo descubrió que los insectos temían tanto el agua como el fuego. Además, una vez eclosionaban y probaban la carne humana, se volvían aún más difíciles de matar.
Chu Yu sólo sentía amargura.
Tuvo el **** escritor que inventarse algo tan complicado con lo que lidiar. El protagonista ni siquiera tuvo que pelear contra esto para subir de nivel, ¿lo habría escrito sólo para eliminar personajes carne de cañón?
¡Se merecía 100 años viviendo miserablemente!
Los huevos estaban en lo más profundo de un bosque, no muy lejos de la ciudad. Los dos se adentraron y casi llegaron a la localización tras un par de días. Mientras se acercaban más y más al área, Chu Yu estaba preocupado.
Fuera de la ciudad había un río, lo cual era genial para alguien de su elemento, ¡pero estaba demasiado lejos del lugar donde los insectos demoníacos aparecerían! No sería sencillo llegar rápidamente al río si pasaba algo en medio de la pelea.
Antes de que a Chu Yu se le ocurriese alguna solución al problema, ocurrió algo.
Alguien murió en las afueras de la ciudad de Fang Ye el día anterior.
Se rumoreaba que el cadáver había sido mordisqueado hasta que lo único que quedaba era un esqueleto blanco y una cabeza ensangrentada. Por la mañana temprano, un vagabundo pasaba por la zona cuando vio algo en la hueva. Fue a echarle un vistazo y lo que se encontró fue una cabeza con dos agujeros ensangrentados donde antes habían estado sus ojos.
El vagabundo quedó aterrado, y se desmayó. Tras despertarse, se arrastró de vuelta a la ciudad, donde informó a todo el mundo de su descubrimiento.
Chu Yu escuchó en silencio los cotilleos de los borrachos en la posada, con mala cara.
Escuchando la descripción de los eventos, le pareció que algo estaba mal.
¡Iban con un mes de antelación!
Hacía tres años, bajó con Xie Xi de la montaña para eliminar a los demonios de agua. Aquellos demonios también aparecieron un par de días antes de lo esperado.
Este problema seguramente estaba relacionado con aquello, pero ahora no era el momento de investigar cuidadosamente el nexo que los unía. Chu Yu suprimió las dudas en su interior y se apresuró a salir de la ciudad acompañado por Xie Xi. Cuando estaban cerca de la zona del bosque donde debían de eclosionar los insectos, oyeron resonar espadas.
Chu Yu se calmó y, sujetando a Xie Xi, examinó la escena. Había una docena de personas vestidas de diferentes colores. Todos llevaban el mismo tipo de túnica de inmortal, y estaban a duras penas tratando de lidiar con montones de insectos demoníacos casi transparentes que volaban por el aire. Chu Yu reconoció su ropa: era el uniforme estándar de los discípulos de la secta de Tian Yuan.
Los discípulos de la secta utilizaron diversos sellos con las manos, herramientas y habilidades. Eran técnicas llamativas y lucidas, pero en vano, sin servir de nada contra los insectos demoníacos.
Al ver que los insectos estaban a punto de romper sus defensas y eliminarlos, Chu Yu se dio cuenta de que era demasiado tarde como para pararse a pensar. Desenvainó a Xun Sheng con un sonido claro y puro y voló hacia adelante, cortando en dos uno de los insectos.
Alguien gritó emocionado al ver a Chu Yu: “¡Chu shixiong!”
Chu Yu no se giró. Miró a los insectos demoníacos sobrevolando el cielo.
Estos insectos demoníacos debían haber eclosionado recientemente. Su cuerpo era del tamaño del puño de un adulto, y el color era casi transparente, con los ojos rojos. Al ver aparecer a Chu Yu, mostraron sus colmillos como amenaza.
Tenían colmillos extremadamente afilados, como navajas.
A Chu Yu le empezó a temblar una ceja al verlo.
¡***********! ¡¿Esas cosas acaban de nacer y ya eran así de viciosas y ansiosas por comer carne humana?! ¡Y encima con éxito! Querían comer carne humana fresca…
Xie Xi, sujetando a Duan Xue, se puso al lado de Chu Yu. Miró por encima a los insectos demoníacos, con el rostro pálido. “Shixiong, ¿cómo has pensado eliminar estas cosas?”
Chu Yu observó los insectos por un momento, y le sonrió tranquilamente a Xie Xi. Antes de que Xie Xi pudiese reaccionar, se pasó Xun Sheng a la mano izquierda y, con la derecha, sacó un talismán de fuego de su anillo de almacenamiento. Miró a los insectos que estaban agrupados en el aire y les lanzó el talismán sin dudarlo.
El talismán no era uno cualquiera. Era difícil librarse de sus llamas. En un instante, todos los insectos se convirtieron en bolas de fuego y cayeron al suelo de golpe.
Chu Yu, sujetando a Xun Sheng, olió el aire y suspiró: “Huele bien.”
Xie Xi, ya calmado: “…”
En un instante los demonios quedaron reducidos a cenizas. Chu Yu se giró a mirar a sus compañeros discípulos a su espalda, que tenían expresiones incómodas. Frunció el ceño.
Song Jingyi había dicho que formasen grupos de cuatro personas, pero tenía a 15 personas delante. Claramente no habían seguido el plan.
“¿Dónde está vuestro Song shixiong?”
“Song shixiong nos dijo que esperásemos aquí,” dijo un discípulo vestido de amarillo, mirando a Chu Yu. “Chu shixiong… ya que te hemos visto, tendrás que esperarte aquí. De lo contrario, tu débil shidi y tú podríais tener un accidente, y no queremos tener que ir a contárselo al anciano Lu.”1
Chu Yu le miró fríamente.
Xie Xi sonrió sin sonreír. “Veo a un montón de gente inútil por aquí.”
El rostro del discípulo de amarillo se puso verde y luego blanco.
Si no se equivocaba, era uno de los muchos discípulos molestos del pico de Qing Ye. Quería que Chu Yu se quedase atrás para escapar.
Xie Xi, por supuesto, no tenía ganas de quedarse.
Chu Yu estaba ansioso por comprobar la situación y no quería seguir perdiendo el tiempo ahí. “Si tienes miedo, regresa inmediatamente a la ciudad.”
Entonces se subió a su espada y se marchó volando.
Al otro le cambió la cara. “¡Chu Yu! ¿Ves a alguien que está al borde de la muerte y no haces nada?”
¡Pero menudo idiota!
Chu Yu miró hacia atrás, furioso. Estaba a punto de echarles la bronca cuando, de repente, escuchó gritos provenientes del bosque. Chu Yu miró a toda prisa y vio un puñado de personas escapando del bosque en sus espadas, pálidos como la nieve, liderados por Song Jingyi.
Al ver al grupo a las afueras del bosque, Song Jingyi gritó: “¡Corred!”
Chu Yu miró detrás de ellos. Cientos de insectos demoníacos, negros como el carbón, zumbaban a sus espaldas. Tenían cabezas de color rojo, como un lago de sangre burbujeante.
Xie Xi se situó al lado de Chu Yu en silencio y miró de reojo su cara.
En este punto, si huían, los mortales que dejaban atrás serían devorados. Si no huían, había centenares de insectos demoníacos que parecían haber probado ya la comida gourmet, una muerte segura.
Además, estos demonios no actuaban como insectos salvajes. Parecían más bien mascotas entrenadas…
Chu Yu apartó a Xie Xi de un golpe. “¡Regrésate con ellos a la ciudad! ¡Yo los distraeré!”
El rostro de Xie Xi se oscureció. “¡Imposible!”
Los insectos demoníacos estaban ya cerca, y no había tiempo de apartarle. Chu Yu dejó de preocuparse y, apretando los dientes, se cortó el brazo, dirigiéndose inmediatamente al río.
El olor de la sangre podía atraer demonios, sobre todo la sangre de un cultivador.
El enjambre de insectos siguió a Chu Yu sin dudarlo, como una siniestra nube negra. Los demás discípulos apenas tuvieron tiempo de reaccionar, sintiéndose tan sólo conmocionados y aliviados.
Uno de ellos miró alrededor, sorprendido, y dijo: “Oh, el shidi de Chu shixiong también se ha ido con él…”
“Otro que quiere desperdiciar su vida,” dijo el discípulo vestido de amarillo de antes. Su tono era indiferente.
La cultivadora que estaba a su lado habló de repente, enfadada. “¡¿Cómo puedes hablar así?! Ahora mismo, si Chu shixiong no hubiese arriesgado su vida para alejar a esos insectos, ¡con lo malo que eres cultivando ya estarías muerto!”
“Su nivel es tan alto, ¿acaso no es su deber proteger a los discípulos más débiles?”
La cultivadora estaba furiosa. De hecho, estaba tan enfadada que su gesto casi parecía una sonrisa. Estaba a punto de reñirle de nuevo cuando Song Jingyi dijo: “¡Demasiado alboroto! ¡No dañes la buena relación entre discípulos de la misma secta por una tontería así!”
Song Jingyi tenía muy mala cara. Sus ojos parecían emitir una luz fría en dirección a la cultivadora, que no se atrevió a volver a abrir la boca.
Song Jingyi sabía perfectamente que estaban siendo perseguidos por los insectos demoníacos porque él les había alertado y había hecho que todos salieran.
Además, mientras huían habían dejado a varias personas atrás.
Mirando en la dirección por la que se había marchado Chu Yu, Song Jingyi apretó los dientes y dijo: “Los discípulos internos se quedan conmigo. ¡Los demás deben marchar inmediatamente de vuelta y activar las defensas de la ciudad!”
Si quieren apoyar la traducción, pueden donar algo aquí~ es totalmente opcional, pero lo agradecería mucho <3
Capítulo en inglés de BC Novels aquí
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AKB BKA
Estoy leyendo la versión en inglés y no puedo esperar a que lo traduzcas 😍😍