Salad Days (Chinese to Spanish Translation) - Capítulo 15
Tras los esfuerzos del pollo Tony, los huevos debajo de su culo finalmente eclosionaron en aproximadamente 21 días.
Los pollitos necesitaban agua hervida las primeras 24 horas. Tan Lingling sacó la harina de maíz y el agua limpia que ya había preparado de antes. Después de dos o tres días de alimentarlos, el pelo de los dos polluelos se había vuelto esponjoso y suave.
“Después de estar a dieta a base de verduras, que les den carne”. Tan Lingling puso a los dos pollos en una canasta de mimbre y le pidió a Jiang Shen que se los llevara al Palacio Cultural. “No les pueden dar mucho verde. Si les da diarrea se pueden morir”.
Jiang Shen prometió: “Lo tengo”.
“¿A quién se lo vas a dar?” preguntó Tan Lingling
Jiang Shen: “A Song Xin y Bai Jinyi, uno para cada uno”.
Tan Lingling: “¿Puede tu amigo rico de segunda generación criar pollos?”
“Podrá”. Jiang Shen pensó, “su familia tiene un gran jardín”.
Jiang Shen fue muy cuidadoso en todo momento con los pollitos mientras iba al coche.. Su velocidad al caminar era dos veces más lenta que de costumbre. Antes de llegar a la sala de baile, Song Xin estaba esperando en la puerta principal y sus ojos se iluminaron cuando lo vio.
“No te precipites”. Jiang Shen estaba rodeado de tanta gente que apenas podía pararse. Dejó su canasta en el suelo, rodeado de chicas estiradas en el suelo.
La cara emocionada de Song Xin se puso roja: “¡Escuché el piar del pollo!”
Jiang Shen dijo con una sonrisa, “Han estado todo el camino piando”. Levantó con cuidado la tela sobre la canasta. Song Xin estiró el cuello y vio las cabezas de los dos polluelos amarillos, y se sonrojó de oreja a oreja con un ‘ah’.
Las chicas de alrededor, por supuesto, tampoco pudieron evitarlo, repitiendo la misma onomatopeya una tras otra, y todas sus cabezas estaban ansiosas por ver la canasta.
“No intenten cogerlos por diversión.” Jiang Shen dijo con seriedad: “Son pequeñitos, se pueden morir”.
Song Xin dijo: “No los toco, no los toco”.
Jiang Shen tomó otra canasta para ella, cogió un pollito y se lo dio: “Le he puesto harina de maíz. Te lo traeré la próxima vez y también puedes alimentarlos con algunas verduras picadas”.
Song Xin sostuvo la canasta como si se tratase de un tesoro, y quería memorizar profundamente lo que le había dicho Jiang Shen.
Cuando Jiang Shen vio que no tendría ningún problema, fue al salón de boxeo de al lado con la canasta. Lai Song había estado mirando a la puerta durante mucho tiempo. Cuando lo vio, no pudo evitar gritar: “¿Qué haces, hadita? ¿Qué es todo este parloteo?”
Jiang Shen lo ignoró y miró dentro: “¿Dónde está Bai Jinyi?”
Lai Song recogió la siguiente ceja, volvió la cabeza y gritó: “¡Segunda generación Bai!”
Bai Jin se acaba de cambiar de ropa para boxear. Por su cara, no estaba muy tranquilo. Se acercó lentamente y preguntó: “¿Me buscabas?”
Jiang Shen lo miró cálidamente: “Te buscaba”.
Lai Song miró fijamente la canasta: “¿Qué hay dentro?”
Jiang Shen: “Un pollito”.
Lai Song parpadeó: “¿Por qué le das un pollito? ¿Lo criaste para que se lo coma?”
Jiang Shen: “…” Ya no quería hablar más con Lai Song. ¡No son para comérselos! ¡Son muy pequeños todavía, se tiene que esperar a que crezcan!
Bai Jinyi miró a Lai Song amenazante. Extendió la mano y levantó la tapa.
La amarilla y peluda del pollito se asomó, pero se dio la vuelta y se hizo bolita, temblando. Pió suavemente y aún así algo se sentía mal.
Lai Song: “…”
Bai Jinyi: “…”
Se quedaron mirando la canasta como si tuvieran miedo, y no se movieron durante mucho tiempo.
Jiang Shen se jactó: “¿A que es super lindo?”
Lai Song levantó la mano, se tapó los ojos y dijo: “Nunca volveré a comer pollo”.
Bai Jinyi no quiso prestarle atención. Miró a Jiang Shen: “¿Me lo das?”
“¡Sip!” Jiang Shen puso la canasta en sus brazos y le dijo con seriedad: “Debes cuidarlo bien. No puedes dejarlo morir”.
Bai Jinyi y Lai Song se sentaron de piernas cruzadas frente a la canasta de pollo. Lai Song mira a Bai Jinyi: “¿De verdad quieres criarlo?”
Bai Jinyi lo miró de reojo: “¿Quieres hacerlo tú?”
Lai Song rápidamente hizo un gesto con la mano: “Woah, no puedo criar un pollo tan valioso”.
“¿Cuánto valor le podrías dar a un pollo?” Bai Jinyi murmuró: “Son lindos de pequeños, pero cuando crecen…”
Luego echó otro vistazo a la tela, al igual que Lai Song. Miraron a los pollitos dormidos con la cabeza una encima de la otra.
No sabía si podían soñar, pero las pequeñas alitas esponjosas de los polluelos se sacudían suavemente y piaron dos veces en sueños.
Bai Jinyi: “…”
Lai Song: “…”
¡¡Son tan malditamente lindos!!
Lai Song dijo seriamente: “Críalo, críalo, el pequeño cisne te lo dio, pero no te lo comas cuando crezca, tienes que cuidarlo hasta que se muera”.
Bai Jinyi: “…”
Después de que Jiang Shen le diera el regalo, Song Xin estaba muy animada. Él y Song Xin se pusieron cara a cara a abrirse de piernas, y susurraron entre ellos.
“¿Compraste zapatos nuevos?” Song Xin tenía buenos ojos y se dio cuenta, “en el frente no tiene la almohadilla, ¿no se te hace incómodo para los dedos?”
Jiang Shen sacudió su empeine: “Estoy bien… Estoy acostumbrado a ese par”.
Song Xin se rió y dijo seria, “pero no puedes descuidar todo lo que aprendiste sobre el movimiento de pie. Los hombres y las mujeres son iguales en eso, tienes que practicar bien”.
Jiang Shen estaba un poco orgulloso: “Puedo ponerme la almohadilla en la punta del pie”.
“Sigues siendo joven.” Song Xin en un tono adulto, “como los grandes, los bailarines casi no necesitan almohadillas para la punta de los pies”.
Pareció pensar en algo, y Song Xin preguntó: “¿Has visto la versión masculina del lago de los cisnes?”
Jiang suspiró: “No tengo ordenador… no puedo verla”.
Song Xin: “Míralo en la sala de baile”.
Jiang Shen negó con la cabeza: “Soy el único chico. No puedo ver la versión masculina solo por mí”.
Song Xin pensó que tenía razón, pero después de un tiempo se le ocurrió una idea. Dijo feliz: “¡Ve con Bai Jinyi! Debe tener ordenador. Míralo con él.
Jiang Shen solo respondió vagamente.
La entrenadora Lin ya había llegado. Después del calentamiento, los estudiantes se pusieron en dos filas, haciendo los pasos de Battement y Releve. Jiang Shen miró su postura en el espejo y suspiró.
Ya se había vuelto loco pensando cómo devolverle el favor del KFC, si le pide prestado el ordenador a Bai Jiny … Jiang Shen realmente no sabía qué más hacer para devolvérselo.
Después de tres horas de clase de baile, la profesora Lin se fue después de dejar la tarea. Song Xin estaba ansiosa por regresar por el pollito. Jiang Shen estaba demasiado avergonzado para ir a la sala de boxeo de al lado para encontrar a Bai Jinyi después de limpiar.
Mientras limpiaba, entró por la puerta un conocido.
“¿Qing Lingzi?” Jiang Shen se sorprendió y dijo: “¿Por qué estás aquí?”
El Palacio Cultural era muy grande, y los que estudiaban arte y caligrafía estaban en otro edificio. Qing Lingzi nunca iba a verlo porque sí, pero hoy, de alguna manera, gue hasta donde estaba.
Qing Lingzi: “Terminó tu clase”.
Jiang Shen asintió con la cabeza: “Sí, estoy listo para irme ya. ¿Nos vamos juntos?”
Qing Lingzi vaciló un momento, pero dijo: “Te pregunto, ¿dónde está Goumao?”.
Jiang Shen estaba atónito. Era sábado, si Goumao no estaba en el campo, es que habría seguido a sus compañeros de escuela “ricos” al karaoke como trabajo, pero era un secreto, así que no podía decírselo a Qing Lingzi.
Jiang Shen pretendió inocencia: “¿el hermano Maoxiu no está en casa?”
Qing Lingzi lo miró sospechosa: “¿Realmente no lo sabes?”
A Jiang Shen no se le daba bien mentir, pero también le prometió a Chen Maoxiu que lo mantendría en secreto, por lo que tuvo que sostener la cabeza y decir “Mn”.
Chen Qingling estaba un poco decepcionada: “Entonces lo encontraré yo misma”.
Jiang Shen se sorprendió: “¿Y dónde lo vas a buscar?”
Chen Qingling entrecerró los ojos: “No soy tan estúpida como tú. Sé con quién va y a dónde después de la escuela. Es un karaoke, así que lo buscaré uno por uno”.
Jiang Shen “…”
No importa cómo se diga, no podía dejar que una niña vaya sola a un karaoke para encontrar a alguien. Jiang Shen no podía detenerla, por lo que solo le quedaba acompañarla.
No traían mucho dinero y solo podían tomar el autobús. Afortunadamente, los KTV regulares se concentraban en el centro de la ciudad, por lo que no eran difícil encontrarlos.
Incluso si lo encuentra, no podía no tenían dinero para entrar en una habitación privada. Chen Qingling no se dio por vencida y se paró frente al mostrador y preguntó “¿Para entrar debes registrarte?”
El empleado se rió: “Esto no es un hotel, toda la gente que viene aquí es gente seria. Simplemente cantan. No necesitan registrarse”.
Jiang Shen se sintió aliviado cuando escuchó que ‘todas las personas que vienen aquí son personas serias’. Consoló a Qing Lingzi y dijo: “Verás, Goumao no está siendo traído por malas influencias. Solo viene aquí los fines de semana para relajarse. No tienes que preocuparte”.
Chen Qingling dijo: “¿Quién está preocupada por él?”
Jiang Shen sonrió. Tiró de Qing Lingzi hacia la parte posterior del pasillo. Se quedó pensando en cómo persuadir a su hermana pequeña para que se vaya, cuando de repente oye que alguien lo llama.
“¡Pequeño cisne!” Era Lai Song, no sabía de qué habitación privada lo estaba llamando “Pequeño cisne, ¿por qué estás aquí?”
Chen Qingling no respondió: “¿Quién es ‘pequeño cisne’?”
Jiang Shen: “…”
Lai Song no lo daban vergüenza los extraños en absoluto. Cuando vio a Chen Qingling, no hablaba en serio: “Y, ¿quién es? ¿Es tu pequeña amiga?”
Jiang Shen rápidamente negó: “No, no, es mi hermana pequeña”.
Chen Qingling dijo desconfiada: “¿Quién eres tú?”
Lai Song se señaló a sí mismo: “Soy amigo de tu hermano”. Miró a Jiang Shen, “¿cómo es que viniste a cantar?”
“No vine a cantar”. Jiang Shen trató de explicar. Miró alrededor de Lai Song y sintió un poco de curiosidad. “¿No vino Bai Jinyi contigo?”
Lai Song abrió mucho los ojos: “¿Venir? ¿Cómo puede ser eso? Le diste un pollito hoy. ¡Tuvo prisa por volver y cuidarlo!”.
“…” Jiang Shen casi se olvida, pero es mejor que Bai Jinyi no haya venido. De alguna manera, Jiang Shen se sintió aliviado y agradecido, aunque no sabía de qué estaba agradecido.
Mientras pensaba, Qinglin de repente dijo “ah”, y tiró de Jiang Shen para ponerse de cuclillas. Lai Song les siguió inconscientemente a esconderse también, aunque le fue difícil por su cuerpo robusto.
“¿Qué estáis haciendo? Tanto secretismo.” Dijo difícilmente al susurrar, saliendo su voz nasal.
Jiang Shen temía que no cooperara, por lo que tuvo que dejarle claro: “Qing Lingzi vino a buscar a su hermano, y es ese hombre”. Le tendió la mano y apuntó desde la distancia para Lai Song.
Su vista de 2.5 hizo que lo pudiera ver sin esfuerzo. Frunció el ceño como si estuviera recordando algo. Se palmeó el muslo y dijo: “Se ve muy familiar. Tu hermano es el recadero en la habitación privada de al lado”.
Qing Lingzi volvió la cabeza y dijo, “¿Recadero?”
“Míralo por ti misma.” Lai Song dijo: “Hay como una docena de personas cantando en la habitación privada de al lado. Las bebidas de este sitio son demasiado caras, pero se pueden conseguir haciendo que ese chico sea el recadero y se los traiga a cambio de cuatro o cinco yuanes por botella”.
Qing Lingzi no dijo nada, solo sotuvo sus piernas y miró a Chen Maoxiu, que estaba recolectando dinero.
Jiang Shen hizo todo lo posible por hacerle un guiño a Lai Song para que parara, pero el tonto no lo entendió.
“También le preguntamos por qué era que ganaba tan poco dinero. No parecía pertenecer a una familia pobre que no podía pagar una matrícula”. Lai Song se tocó la barbilla y se rió, “¿Qué dijo que quería comprar? ¿Cuál marca era…? Bueno, es un famoso pincel de pintura al óleo de todos modos”.
Jiang Shen: “…”
Qing Lingzi dijo de repente, “Escoda”
Lai Song: “¡Sí! Esa es la marca.” Después de una pausa, finalmente respondió,” ¿Quieres comprártela? “
Qing Lingzi no respondió. De repente se puso de pie. Chen Maoxiu había desaparecido. La niña estuvo a espaldas de Jiang Shen durante mucho tiempo y de repente echó a correr.
Jiang Shen se sorprendió. Se despidió de Lai Song a toda prisa y corrió tras ella.
“¡Qing Lingzi!” Jiang Shen la llamó, “¿a dónde vas?”
De hecho, Chen Qingling no sabía adónde va. Se detuvo entre la multitud.
Jiang Shen la alcanzó y giró su cabeza para poder ver la cara de Qing Lingzi. La niña no giró su cabeza y tampoco decía nada.
Jiang Shen: “…”
“Ese juego de brochas es muy caro”. Chen Qingling dijo de repente: “Mis padres también saben que me gusta, pero es demasiado caro para comprarlo”.
Jiang Shen estaba avergonzado: “Lo sé …”
Chen Qingling: “En otros dos años, es posible que ya no pueda seguir aprendiendo a pintar”.
Jiang Shen se sorprendió y rápidamente dijo: “¿Cómo puede ser? Goumao siempre dijo que querías ser una gran pintora”.
Chen Qingling negó con la cabeza. Levantó el brazo y se secó los ojos.
“Odio más a mi hermano”. Chen Qingling susurró.
Jiang Shen: “…”
Chen Qingling levantó la cabeza con sus ojos rojos, sonriendo: “Es lo que más odio”.